El Open Banking en México: realidad, retos y perspectivas

México es la 17ª economía del mundo, tiene una sólida banca digital y es pionero en la legislación para las fintechs. ¿Pero está realmente preparado para implementar el Open Banking en su territorio?

Según un estudio de la revista Expansión, México ocupa el puesto número 17 entre las economías mundiales por volumen de PIB. Pionero, junto con Brasil, de la regulación para el Open Banking en América Latina, el país se encuentra ahora en el camino hacia la inclusión financiera y la bancarización.

No se trata, sin embargo, de una senda fácil. El país todavía enfrenta un alto grado de desbancarización, y aunque las fintechs y la banca digital van cobrando fuerza a cada día que pasa, es necesario implementar políticas de educación financiera para vencer la desconfianza que todavía persiste en gran parte de la población hacia los servicios financieros digitales.

¿Pero está el país preparado para este modelo de servicios financieros? Las instituciones financieras tradicionales pueden ver al Open Banking como una amenaza, pero el ejemplo de los bancos europeos, principalmente del Reino Unido, abre la perspectiva para verlo como realmente es: una oportunidad para extender el abanico de sus servicios financieros y contribuir a la inclusión financiera tan necesaria en México y el mundo.

En este artículo exploraremos las características del modelo del Open Banking en México, sus desafíos inherentes al país y las perspectivas para el futuro.

¿Qué es Open Banking?

Literalmente, “Open Banking” significa “banca abierta”. Se trata de un modelo cuyo objetivo es que la información financiera de las personas ya no sea territorio de una sola entidad, sea tradicional o de nuevas plataformas. La idea es que pueda ser compartida e intercambiada para desarrollar nuevos productos y servicios personalizados, diseñados a la medida de los usuarios. Eso permite ampliar la oferta de productos y servicios y generar una mayor competencia en el sector.

Básicamente, la banca abierta es un sistema en línea en donde los clientes de las empresas que prestan servicios financieros como fintechs, casas de bolsa, sociedades financieras populares y sociedades de ahorro y préstamo, autorizan compartir su información con otras entidades.

Un ecosistema financiero abierto impacta positivamente al menos en cinco grandes rubros:

• Infraestructura tecnológica;
• Transparencia de información;
• Complementación de servicios;
• Mejora en la experiencia del usuario;
• Acceso a mejores y nuevas herramientas financieras.

Estos aspectos se pueden traducir en múltiples beneficios para todos los players involucrados en la industria financiera.

Historias de éxito, como las del Reino Unido, pionera en este concepto, y Brasil, que ocupa un lugar destacado en América Latina con el Open Finance, abren la perspectiva para la implementación mundial de este sistema.

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¿Cómo funciona el Open Banking?

En esta era digital, la información es poder. Esto lo saben muy bien las grandes empresas que manejan Big Data, como Amazon, Google y Facebook, entre muchas otras. Esta información es vital para conocer mejor a los usuarios, identificar sus gustos y preferencias y personalizar sus ofertas de productos.

La banca digital ha captado este concepto y ha creado nuevas plataformas y herramientas para los usuarios,que a la vez permiten recabar su información. Sin embargo, la mayoría de las empresas sólo tiene una información parcial de sus clientes y es difícil acceder a información de terceros. El Open Banking busca derribar esta barrera para las entidades financieras.

La tecnología ha venido al rescate mediante la creación de nuevas herramientas de almacenamiento, captura, búsqueda, intercambio y procesamiento de datos, entre las cuales sobresalen las APIs, cuyas siglas en inglés significan “interfaces de programación de aplicaciones”.

En esencia, las APIs son un protocolo de comunicación entre dos aplicaciones. Esto permite que un tercero pueda conectarse a un proveedor para consumir una serie de datos de manera fácil y segura. Asimismo, sirven para llevar a cabo diferentes funciones o procedimientos. En el caso específico del sector financiero, las fintechs y otras entidades financieras pueden conectarse a distintos bancos mediante API financieras de Open Banking en México.

¿Cuáles son las ventajas del Open Banking?

El Open Banking ofrece diversas ventajas tanto a usuarios como a las empresas proveedoras de servicios financieros, y desde luego, para el país.

Para los usuarios

• Al ser los auténticos propietarios de la información, los usuarios podrán concentrar, en un solo sistema, información sobre cuentas bancarias y de ahorros, créditos hipotecarios y tarjetas de credito, aun cuando dichos productos sean de diferentes entidades bancarias.
• Al compartir esta información, ya sea por única ocasión, por tiempo determinado o de manera indefinida, podrán recibir recomendaciones sobre cómo pagar menos comisiones en servicios, cómo liquidar más rápidamente sus deudas y cómo conseguir mayores rendimientos.
• Contarán con ofertas personalizadas, a la medida de sus necesidades, y una perspectiva más amplia de sus finanzas, lo cual permitirá que administren mejor su dinero.

Para las instituciones financieras

• Es una gran oportunidad para ofrecer a los usuarios productos financieros personalizados específicos para cada cliente, mejorando así su experiencia.
• Un mayor valor agregado a sus ofertas.
• Un aumento en la competencia, lo cual propicia la innovación y la creatividad.
• Es una forma simple y segura de ayudar a las pequeñas empresas a gestionar sus finanzas con mayor efectividad.

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Al país

• En México, el Open Banking es la herramienta primordial para lograr esa inclusión financiera que permita la movilización y agilización de la economía, y la exitosa, plena entrada del país a la nueva era del banking y los servicios financieros digitales, sustentados en las ventajas de rapidez, eficiencia, efectividad y seguridad que sólo una tecnología de punta puede brindar.

Open Banking en México: avance, retos y perspectivas para su implementación

En México, y de cara al crecimiento del sector fintech, el gobierno creó en 2018 un marco normativo sin precedentes, que se ha convertido en una benchmark a nivel mundial. Se trata de la Ley para Regular a las Instituciones de Tecnología Financiera, conocida comoLey Fintech”, que ayudó a establecer una arquitectura operativa para empresas no bancarias que ofrecen servicios de pagos electrónicos y de financiamiento colectivo.

Esta legislación estableció que tanto la banca tradicional, como cualquier entidad financiera, compartan su información con terceros. Esto abrió la puerta para que más de 2 mil empresas generen combinaciones de intercambio de información, con el propósito de perfeccionar la oferta a usuarios finales de productos financieros.

La Ley Fintech establece también que el intercambio de datos se dé con empresas no financieras, lo que convirtió a México en el único país en el mundo en donde se tiene este tipo de intercambio.

No obstante ser una legislación avanzada, aún no se concretan los avances suficientes en adopción de interfaces de programación de aplicaciones (APIs) para que la regulación mexicana funcione en un nivel óptimo.

Esto nos lleva a los principales desafíos enfrentados para la implementación del Open Banking en México:

• La falta de infraestructura, la brecha digital y la desbancarización que aún persiste en México, sobre todo en poblaciones rurales, son dos de los factores que más dificultan el desarrollo del Open Banking en el país.l Abierto Banking en el país.
• Cambio de mentalidad con respecto a la seguridad. Según datos del Banco Mundial, México está entre los diez países en el mundo con mayor cantidad de ciberataques por año. La posibilidad de que la información personal esté en riesgo obligará a crear confianza en el público y las empresas con respecto a las medidas de prevención fraude y de protección para blindar los datos.

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Ahí está el futuro del Open Banking en Mexico

Si bien todavía hay un largo camino por recorrer en cuanto a la dinamización de la ley y la implementación de políticas públicas de amplio espectro para que los usuarios reciban los beneficios del Open Banking en México, la legislación mexicana ha puesto ya los cimientos para que la banca abierta sea una realidad de gran impacto en el país.

Este impacto ya se refleja en la industria financiera mexicana. Según el Radar Fintech e Incumbentes 2021 de Finnovista, en el país existen 512 startups con soluciones financieras digitales, lo cual representa un incremento de 16% con respecto a 2020.

La perspectiva del Open Banking en el sector financiero mexicano ha levantado grandes expectativas, según la encuesta Open Banking en México: diagnóstico y tendencias, realizada por Finerio en 2020:

Los principales bancos tradicionales del país ya operan digitalmente mediante apps y APIs diseñadas exclusivamente para cada caso. La banca digital tiene, pues, la solidez necesaria para avanzar hacia los nuevos horizontes que plantea la banca abierta.

En palabras de Nick Grassi, Co-CEO de Finerio Connect: ““Un ecosistema financiero abierto es altamente benéfico para las instituciones del sector. Pero, más importante aún, es algo que beneficia a los usuarios finales,quienes terminan por ser dueños de su información y recibir productos, atención y servicios hechos exactamente a la medida de sus necesidades. Si la industria en México camina hacia satisfacer a sus clientes, eso no hará más que abonar al desarrollo de todo el ecosistema. Es, definitivamente, un modelo de ganar-ganar para todos".

El rol de Dock en el futuro del sector de banking y medios de pago en México

El futuro, sin embargo, descansa pesadamente en las fintechs y empresas de otros sectores y su posibilidad de ampliar la gama de sus servicios financieros, con la ayuda de plataformas inteligentes como la que ofrece Dock - con Dock One.

Con la tecnología de punta de la plataforma, y sus servicios de Banking, Cards & Credits, Acquiring y Fraud Prevention, Dock contribuye al desarrollo del sector de banking y medios de pagos de Mexico al encargarse de todo el tejido tecnológico, de operación y tesorería, facilitando así el camino a las empresas para ir más allá de los servicios tradicionales y adentrarse en el campo de la banca abierta para moldear un ecosistema financiero, abierto, sólido, incluyente y saludable.

Open Banking en México: Resumen

• El Open Banking es un sistema financiero abierto que permite el intercambio de información entre las diversas entidades financieras.
• En México, la Ley Fintech, primera en su tipo y referente mundial, ha establecido los cimientos para la implementación de la banca abierta en el país.
• Si bien el país enfrenta desafíos, existe una consciencia entre las empresas y las instituciones de que es necesario integrarse de lleno a la tendencia del Open Banking que ya campea por los ámbitos financieros de todo el orbe.
• El Open Banking fomenta la competencia y la innovación para ofrecer a los usuarios finales soluciones financieras personalizadas, de acuerdo con sus necesidades específicas.

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